Azul y Blanco pisa suelo asiático
La Selección Nicaragüense de Fútbol arribó este domingo a Irán, para jugar su cuarto amistoso fuera del continente americano en menos de dos meses, en un hecho sin precedentes en la historia de nuestro modesto deporte. En este caso, la Azul Blanco se chocará contra este onceno asiático en la capital del país.
La escuadra pinolera llegó a Teherán al mediodía local, siendo madrugada de Nicaragua, pues la diferencia entre ambas naciones es de 9 horas y 30 minutos. Al aterrizar, todo el grupo fue recibido por el Ingeniero Isaac Bravo Jaen, embajador de Nicaragua en Irán, quien brindó una calurosa bienvenida a la delegación.
De inmediato se trasladaron a su hotel de concentración ubicado en el corazón de la capital iraní, donde almorzaron de inmediato y luego procedieron a descansar durante la tarde. Posteriormente, a eso de las 7 de la noche, el equipo desarrolló su primera práctica en territorio persa.
El entrenamiento se llevó a cabo en el Complejo Deportivo y cultural de Ararat. Ahí utilizaron un Estadio Olímpico con césped natural y graderías para unas cinco mil personas, con modestos vestidores y banquillos. El trabajo de los muchachos se hizo en un frío intenso que rondaba los 6 grados centígrados.
Al concluir la sesión, todo el equipo volvió al hotel para cenar y descansar. Este lunes está previsto que realicen un entrenamiento vespertino y continúen con el descanso y terapia pertinente, para recuperar la fatiga del intenso viaje que constó de casi 36 horas, debido a la distancia que existe entre Nicaragua e Irán.
El partido entre la Azul y Blanco y los persas será el jueves 10 de noviembre a las 7:30 de la noche hora local (10 am hora nica) en el Estadio Nacional de Irán. Este duelo será de preparación para Liga de Naciones y servirá como despedida de los anfitriones frente su afición, antes de partir hacia la Copa del Mundo Qatar 2022.