Los hilos de Tony
Nunca se quejó. Peleó con lo que tenía. Siempre confió en sus jugadores. El premio a su fe es el pase a la final. Tony Rodríguez nunca había dirigido en esta liga y solo había estado al lado de Lenin Picota como entrenador. Estableció un estilo en el Tren del Norte, dijo que iba a correr mucho y que no esperaba dar muchos jonrones. Tomó todos los riesgos que pudo y fue el equipo más robador de la liga. También dijo que iba a ser un incansable 24/7 y siempre buscó como darle un toque ganador al equipo. Le costó mucho.
Sacó algunos conejos del sombrero; Haxel Carrasco fue un extraordinario reemplazo en primera y en el left cuando se lesionaron Elian y Renato. La liga lo designó el novato del año. Bryan Herrera abriendo juegos claves, Nolan Cruz y su cierre, Walter López convertido en un clave del relevo. Terminó con la peor efectividad de los clasificados 6.29, con la penúltima cantidad de jonrones 19, usó a 10 abridores diferentes y por mucho tiempo, solo tuvieron a un abridor hasta que llego Kevin Kelly de refuerzo.
Sus fuertes fueron el bateo, el segundo mejor de la liga y los mejores en defensa con solo 42 errores. No eran favoritos al entrar a la segunda vuelta, pero algunos hombres fueron más que nombres en el terreno de juego. En un momento el equipo era un hospital disfrazado de equipo de béisbol. Montes golpeado, Bone con la rodilla lastimada, le sacaron liquido a Lago, Elian con la muñeca inflamada, Roniel enfermo, Darwin con 7 puntadas en la boca, Renato resintiendo una lesión y para colmo me fallan tres pitcheres extranjeros.
Algunas cosas salieron bien, Luis Ramírez no fallo como número uno a pesar de algunos parpadeos. Lago entró en ritmo, Elian funcionó como un verdadero slugger y la dupleta Montes Richards fue letal, sin negar que Canelo y Manny fueron hombres de clutch importantes. Renato no falló y Omar Obregón se convirtió en una gran emergencia como defensor de las paradas cortas. En otras palabras, el manager siempre se colgó de alguien inesperado para tapar los huecos.
Vale mencionar que nadie sabía quienes eran Manny García, Malquin Canelo y Jairus Richards y llegaron a poner un nombre que les puede permitir regresar a la próxima liga. No sobró quien opinara que el Tren se arriesgaba con un manager sin experiencia.
Ahora pregúntese, ¿Debe ser manager de esta liga?